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A finales del mes de abril, en una compleja operación policial, se desmanteló el mayor taller de Europa de falsificación de monedas de 2 euros. Esta fábrica clandestina cayó en la localidad toledana de Villacañas y la investigación determinó que detrás estaba una organización de ciudadanos chinos que habría logrado introducir alrededor de 100.000 monedas falsas de este tipo en España y unas 400.000 en territorio comunitario.
La noticia hizo sospechar a los agentes de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja que, a mediados del mes de abril, tuvieron constancia de que dos menores, un chico y una chica de 16 y 15 años, respectivamente, habían intentado colar varias monedas falsas, precisamente de dos euros, en un kiosco del centro de la capital riojana. Ahora investigan si estas monedas proceden del mismo taller chino desmantelado en aquella operación en la que intervinieron tanto Policía como Mossos y Europol.
Los dos jóvenes son viejos conocidos de la Policía y ambos cuentan con reseñas policiales anteriores: él por robo con fuerza y hurto, mientras que ella también por hurto. Y, en este caso, acudieron a dicho kiosco a solicitar al dueño que, por favor, les cambiara su dinero en efectivo por un billete.
En este intercambio aprovecharon para darle gato por liebre. Le entregaron varias monedas falsas de dos euros y recibieron dinero de curso legal en billetes. No obstante, el kiosquero se percató de la estafa y rápidamente avisó a una patrulla de la Policía Municipal, que interceptó a los dos chavales y les requisó un total de 20 monedas falsas más, diez a cada uno, y todas ellas de dos euros.
Las monedas, pese a ser muy similares, sí presentaban algunas diferencias que hicieron saltar las alarmas del kiosquero. Por un lado, el canto no estaba troquelado con las estrellas habituales en este tipo de divisas. Por otro, tampoco presentaban la inscripción clásica de “euro” en una de sus caras, sino que se podía leer “furo”.
Más allá de la cuantía económica del engaño, que es muy reducida, los agentes pusieron el foco en el caso por las monedas empleadas. Actualmente, según fuentes policiales, los especialistas están investigando si existe relación entre las monedas empleadas por estos dos rateros en La Rioja y las divisas que puso en circulación el taller de falsificadores chinos desmantelado hace unas semanas en Toledo.
Los artesanos asiáticos de aquel taller eran capaces de replicar prácticamente a la perfección las monedas de dos euros, por lo que eran casi indetectables y una herramienta perfecta para los ludópatas chinos, que las compraban a la mitad de su valor en la calle y así podían apostar con menor desembolso. La investigación de la policía riojana tendrá que determinar, ahora, si estas monedas encontradas en los bolsillos de dos menores de edad se corresponden con algunas de las fabricadas en el gran taller clandestino de Villacañas.
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