Josep Borrell ha respondido a los rumores sobre que pudiera ser él la persona que liderara la lista del PSOE a las elecciones europeas del próximo 9 de junio. Durante un acto de Nueva Economía Forum celebrado este martes en Bruselas, el jefe de la diplomacia europea, que ya lideró las listas socialistas en 2019 cuando era ministro de Asuntos Exteriores, ha explicado que debe permanecer en su puesto actual hasta el “final del mandato”, algo que llegará en otoño de 2024. “Todo el mundo entiende que tengo un trabajo que no puedo dejar”, ha señalado el catalán, mostrando que no tiene apetito por liderar la lista y subrayando que sería "una irresponsabilidad" dejar a un lado su cargo actual para centrarse en las elecciones.
En realidad el Alto Representante de la Unión para Política Exterior y de Seguridad, un puesto que lleva ocupando desde finales de 2019, podría hacer campaña con el PSOE e ir en la papeleta sin tener que abandonar su cargo ni tampoco tener que dimitir. Sin embargo, Borrell sí que debería abandonar su puesto si quisiera asumir el escaño como eurodiputado a partir de julio. En realidad, Borrell estuvo en una situación similar en 2019: encabezó la lista socialista siendo ministro, pero después no asumió su acta de eurodiputado, permaneciendo como ministro hasta que fue confirmado como Alto Representante. Nada impediría, por lo tanto, que el catalán repitiera la jugada: encabezar la lista del PSOE pero no asumir el escaño, pudiendo así permanecer como jefe de la diplomacia europea hasta el final del mandato. Pero este martes ha sido muy contundente subrayando que su preocupación principal está en su puesto como jefe de la diplomacia europea.
“Creo que todo el mundo entenderá que tengo un trabajo que no puedo abandonar. No puedo decir: ahora voy a dejar el trabajo de Alto Representante. Sería una irresponsabilidad, porque la situación es mala y podría empeorar para el verano”, ha señalado Borrell, haciendo referencia al temor de que Rusia redoble su ofensiva en Ucrania durante la primavera en un momento en el que las líneas de defensa ucranianas se encuentran debilitadas y con un problema de abastecimiento de munición. Tanto a nivel de la OTAN como a nivel de la Unión Europea se considera que los próximos meses requerirán de mucha atención, aunque fuentes aliadas hablan de un año “estancado” del conflicto.
"No puedo decir: ahora voy a dejar el trabajo de Alto Representante. Sería una irresponsabilidad, porque la situación es mala y podría empeorar"
Borrell había empezado a sonar en las quinielas socialistas como posible cabeza de lista en las últimas semanas por descarte. Teresa Ribera, vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, es la gran favorita para ser la nominada por el Gobierno como próxima comisaria española en la legislatura de 2024-2029, pero nunca ha estado claro que quisiera liderar las listas socialistas a las europeas, ya que no es un requisito estar en la papeleta para formar parte del próximo colegio de comisarios. Además, las encuestas apuntan a que el PSOE tendrá un mal resultado respecto a los de 2019, que le convirtieron en la delegación más grande dentro de los socialdemócratas europeos.
Por otro lado, está la cuestión de la amnistía. El jefe de la diplomacia europea ha mostrado su molestia con la ley, incluso en público. “Todos los que me conocen en España y saben mi trayectoria personal y política previa pueden imaginar lo que pienso”, señaló durante una rueda de prensa celebrada en Bruselas en noviembre, poco después de que el PSOE y Junts cerraran un acuerdo de investidura. “Esos acuerdos me provocan alguna preocupación o bastantes preocupaciones lógicas”, explicó entonces Borrell.
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