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Era la última pieza que faltaba para confirmar el unánime cierre de filas del PP con Alberto Núñez Feijóo. La Fundación FAES, que lidera José María Aznar, ha salido en defensa del líder del PP tras la tormenta política por las revelaciones del partido sobre un posible indulto condicionado a Carles Puigdemont. "La desvergüenza del PSOE y de sus socios no tiene límites", arrancaba el escrito, en un tono especialmente duro. "Han convertido la política española en un barrizal de mentiras destructivo para la democracia y el Estado de Derecho", indica.
El expresidente del Gobierno realiza una larga exposición de hechos sobre las cesiones que Sánchez ha hecho al independentismo para mantener la Moncloa. Menciona, por ejemplo, la eliminación del delito de sedición y la rebaja de la malversación; la supresión del delito de la convocatoria de referéndums ilegales; y la firma en última instancia de una proposición de ley de amnistía en busca de la "impunidad" del separatismo pese a que "los jueces investigan actos de terrorismo y tratos con Rusia para desestabilizar nuestro país".
"El Partido Socialista considera ya que Puigdemont no es un prófugo de la justicia, sino un exiliado", añade el editorial de FAES, que apunta a que no es el PP quien debe dar explicaciones sobre los contactos con Junts o sobre la solución política de Feijóo para Cataluña. "Ese 'todo se sabrá', que a modo de amenaza lanzó Puigdemont, si a alguien debe ir dirigido tiene que ser al Gobierno y al Partido Socialista". Justo este miércoles, el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, comprometió que la ley de amnistía cubrirá "a todos" los encausados por el procés, un guiño al expresidente de la Generalitat pese a la investigación abierta por terrorismo.
Ayuso y Feijóo, más allá de las gallegas
Marta García Aller
La Fundación de Aznar minimiza en este punto las amenazas del independentismo al PP. "Que hablen Puigdemont y Cerdán, que hable Bolaños, y que hablen en Bruselas y Ginebra, que hablen los que siguen negociando para garantizar la impunidad de los golpistas no para discutir el qué, sino el cómo. Que se sepa, sí. Todo", zanja. El expresidente del Gobierno, que ha arropado a Alberto Núñez Feijóo en varias protestas del partido contra la amnistía, sale al rescate del líder del PP justo en la recta final de unas elecciones cruciales para los populares.
El propio Feijóo ha cambiado el paso con el paso de los días. Si el pasado domingo mantuvo la idea de que no valora un indulto porque "no se dan las condiciones", el lunes endureció su posición. "Ni acepto los indultos, ni los aceptaré", aseguró el líder del PP. El desconcierto y la presión interna han hecho mella en su discurso, cargando duramente contra las "calumnias" e "insidias" para desestabilizar la recta final de las gallegas, a pesar de que fuentes autorizadas del PP confirmaron la posición que mantiene el líder popular para estabilizar Cataluña y la salida que plantearía al independentismo.
La campaña de las elecciones en Galicia llega a su fin, y Génova trata de apagar la polémica desviando el foco hacia las polémicas que rodean también al Ejecutivo, desde la promesa de una "amnistía integral" verbalizada por Félix Bolaños a la presión contra Fernando Grande-Marlaska por el asesinato de dos guardias civiles en Barbate. Moreno, Ayuso, Rueda y el propio Aznar han cerrado filas con el líder popular. Zanjar el debate sobre los indultos se ha convertido en una cuestión primordial. En juego, la mayoría absoluta en Galicia y la estabilidad del liderazgo de Feijóo.
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