Cumbre de barones de comunidades infrafinanciadas en Fitur. Tres líderes autonómicos del PP y uno del PSOE se han visto en los pabellones de Ifema, donde se celebra estos días la feria de turismo más importante del país. El socialista es el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, la punta de lanza de los dirigentes socialistas críticos con Sánchez. Y los populares son Juanma Moreno, Carlos Mazón y Fernando López-Miras. Murcia, la Comunidad Valenciana y Andalucía son los tres territorios más perjudicados por el actual modelo de financiación autonómica, según los últimos análisis publicados de entidades independientes como la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea). Las tres están por debajo de la media española (base 100) en percepción de recursos para cubrir sus competencias básicas en educación, sanidad o servicios sociales. El otro territorio que se sitúa también por debajo, cuarto por la cola, es Castilla-La Mancha.
Los cuatro presidentes tienen previsto exigirle a María Jesús Montero, ministra de Hacienda, un fondo de nivelación que compense la falta de fondos hasta que se aborde la reforma del sistema de financiación, o en su caso, que sirva de mecanismo estable de reeequilibrio si se incorpora a una nueva Lofca. La falta de acuerdo entre PP y PSOE aleja las posibilidades de que este acuerdo para actualizar la ley orgánica llegue a corto plazo, lo que lleva a estos dirigentes territoriales a elevar la presión en busca de mecanismos transitorios, sea a través de una dotación extraordinaria en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) u otra fórmula de nivelación horizontal. La diferencias no son menores. Cantabria, la autonomía mejor financiada, percibe 726 euros más por habitante ajustado (una vez ponderados factores como envejecimiento o dispersión) que Murcia, la peor financiada en 2021, según el análisis de Fedea realizado a partir de la última liquidación de 2021.
La alianza de barones de distinto signo político no es nueva. En la anterior legislatura autonómica, que acabó el pasado 28 de mayo con una sonora derrota para los socialistas, Ximo Puig ya empujaba a su propio partido para poner en marcha esta reforma, avalada por expertos autonómicos en financiación autonómica. Puig mantuvo encuentros con Juanma Moreno y sus respectivos equipos de Hacienda intercambiaron papeles. La propia Montero reclamaba el mecanismo desde Andalucía en su etapa como consejera regional de Hacienda.
La cumbre informal de los presidentes infrafinanciados ha estado sobrevolada por el informe hecho público hace unos días por Fedea. Los economistas liderados por Ángel de la Fuente propusieron la creación de este fondo complementario con 3.277 millones de euros aportados desde el Estado para apoyar a Andalucía, Comunidad Valenciana, Murcia y Castilla-La Mancha. Andalucía se quedaría con 1.409 millones, Valencia con 1.148, Murcia con 405 y Castilla La Mancha con 315. Las cantidades son inferiores a las que desde estos territorios se venían reclamando, pero aliviarían su déficit crónico estructural.
"Hemos hecho una minicumbre. Una especie de conjura de Fitur", declaró el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón. "El fondo de nivelación es fundamental. Los cuatro estamos de acuerdo en que mientras viene un nuevo sistema de financiación, un fondo de nivelación transitorio que al menos nos equipare a los que están mucho mejor que nosotros es fundamental, es irrenunciable y ya lo exigimos de manera clara cuatro presidentes autonómicos que estamos en el mismo caso", añadió en los pasillos de Ifema.
La Comunidad Valenciana actualizó hace pocas semanas su demanda con un nuevo informe de los expertos designados por las Cortes Valencianas sobre financiación autonómica. La cuantía calculada ascendía a 1.500 millones anuales, 352 menos de los que plantea Fedea. La percepción en la Conselleria de Hacienda es que las quitas de deuda que Montero ha puesto encima de la mesa serán insuficientes para acceder a los mercados de capitales si no se arregla el déficit estructural de ingresos. La Generalitat seguirá dependiendo este 2024 del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para cubrir su presupuesto, el primero del Consell de coalición de PP y Vox.
La madre de todas las batallas (fiscales): cómo mejorar la financiación autonómica
Carlos Sánchez
En la reunión que Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo mantuvieron el 22 de diciembre en el Congreso, el presidente del Gobierno propuso al líder de la oposición crear un grupo de trabajo para abordar esta reforma, pero los populares declinaron el ofrecimiento. Las reservas en Génova tienen que ver con la diferencia de posición que tienen sus barones, con algunos alineados en esta exigencia y otros reticentes. Mazón, Moreno y López Miras gobiernan regiones muy pobladas frente a los barones del norte como Alfonso Rueda, que optan por criterios distintos para calcular el reparto de fondos entre territorios. El propio Rueda, inmerso en plena campaña electoral, ha pedido a Génova que evite abrir el melón o fije una posición favorable a los intereses de Galicia.
El PP reclama al PSOE que este debate debe abordarse en el marco del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para evitar cualquier tentación de que el Gobierno pacte de forma bilateral con Cataluña en virtud a los pactos de investidura de Pedro Sánchez. Los socialistas, por su parte, recuerdan que la norma se debe aprobar por medio de una ley orgánica, que tiene una mayoría reforzada, y que son socialistas y populares los que deben ponerse de acuerdo. Esto es también una forma de presionar a Feijóo, ya que en Ferraz son conscientes de que se trata de un tema espinoso para el líder popular.
{getToc} $title={Tabla de Contenidos}