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Los cambios en la Ejecutiva del PSOE estaban pensados para después del 28 de mayo, pero el resultado electoral inesperado del 23-J y las posibilidades de Pedro Sánchez de formar gobierno dejaron aparcado el capítulo orgánico en el partido del puño y la rosa. En los territorios y en Ferraz se esperaba un terremoto que desembocó en una balsa de aceite. La prioridad era la investidura del secretario general socialista y, una vez que se ha producido y ya hay un nuevo Gobierno, habrá que esperar algo más. Al menos hasta la Conferencia Política que Sánchez ha fijado para los días 20 y 21 de enero en La Coruña y que tiene un doble objetivo: el rearme ideológico del partido y servir de pista de despegue a José Ramón Gómez Besteiro, candidato del PSdeG a las elecciones gallegas del primer semestre de 2024.
A pesar del terremoto generado por la marcha de Podemos de la coalición que dirige Yolanda Díaz, el PSOE y sus socios de Sumar siguen enfrascados en la conformación de los segundos y terceros niveles del gabinete. El grupo parlamentario socialista y las federaciones socialistas todavía verán moverse a dirigentes hacia el Ejecutivo, en una suerte de compensación de la pérdida de poder territorial que sufrió el partido en las elecciones autonómicas y municipales del pasado 28 de mayo. El siguiente paso será la renovación de la Comisión Ejecutiva Federal, explican fuentes socialistas. "Pero no será inminente", apuntan.
El puente de la Constitución dará paso a las fiestas de Navidad y a un mes de enero inhábil en el Congreso. Es cierto que todavía queda actividad en la Cámara, alguna de mucha relevancia, como el primer debate sobre la ley de Amnistía en la Cámara baja, previsto para el próximo 12 de diciembre. Y también se contempla la habilitación de parte del primer mes del año para la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado de 2024, que Sánchez quiere tener aprobados en el primer trimestre del año. Entonces se celebrará ese cónclave orgánico en Galicia que el propio Gómez Besteiro ha saludado y que será el aval de Sánchez en su intento por dar un dolor de cabeza al PP en el bastión de Alberto Núñez Feijóo.
Será en ese contexto cuando Sánchez introduzca cambios en la Comisión Ejecutiva Federal, la cúpula socialista que salió del 40 Congreso, celebrado en Valencia en 2021. En ese organismo hay ministros que había entrado en la remodelación de julio de 2021 y que ya han dejado el Ejecutivo. Miquel Iceta, por ejemplo, no vivirá en España en los próximos años, ya que el jefe del Ejecutivo lo ha designado representante de España ante la Unesco, en París. Y hay otros miembros del Ejecutivo que no están a pesar de que han ganado peso en estos años.
El salto de Pilar Alegría: de portavoz de Ferraz a portavoz de la Moncloa
Enrique Delgado Sanz
Una de las personas que ha ganado en relevancia es precisamente Pilar Alegría, que asumió la portavocía orgánica del partido, además del ministerio de Educación. Al convertirse en portavoz del Ejecutivo, deja vacante, de facto, el altavoz de Ferraz. Pero es cierto que en los últimos meses tampoco había utilizado en demasía el atril. Alegría, que fue la portavoz de la campaña de primarias de Susana Díaz en 2017, compareció en su rol orgánico por última vez el pasado 8 de octubre, más allá de las entrevistas en medios que sí ha concedido.
Es cierto que en algún momento de su etapa de portavoz se ha intercambiado con María Jesús Montero, número dos de la formación, pero en Ferraz no hay prisa por tapar este hueco. En estos dos meses la discreción ha sido la marca de la casa por las negociaciones para la investidura de Sánchez. Santos Cerdán y Félix Bolaños han ejercido también como voceros del PSOE en las firmas de los pactos con Junts y ERC, respectivamente. Eso sí, en Bruselas y Barcelona. Patxi López ha hecho lo propio en el Congreso en alguna ocasión, en su papel de portavoz parlamentario.
"Los cambios en la Ejecutiva podrán tener también una lectura electoral"
Los cambios en la Ejecutiva podrán tener también una lectura electoral, sobre todo respecto a las tres convocatorias que se avistan en el horizonte. Más allá de la elección de La Coruña como sede de la Conferencia Política, no se puede desligar de este proceso de renovación la elección de Juan Espadas como portavoz del Senado. El líder del PSOE andaluz tendrá un foco en la Cámara alta, escenario del combate de la oposición que ha desplegado el PP, que busca reforzar su posición en su camino hacia las elecciones andaluzas de 2026. Es cierto que también juega a su favor, admiten fuentes del PSOE, que no hay otro aspirante en la recámara y que el exalcalde de Sevilla está convencido de que plantará cara a Juanma Moreno en dos años y medio.
Antes, vendrán las elecciones vascas en las que el PSOE quiere crecer, aunque con la certeza de que sus alianzas con el PNV mantendrán buena salud. Y el 9 de junio llegarán las elecciones europeas, una suerte de reválida de las generales del 23-J en las que el PP querrá aprovechar el desgaste de la amnistía. Luego será el turno de las elecciones catalanas, que se celebrarán como muy tarde a inicios de 2025 y que también estarán marcadas por la relación de los socialistas con Junts y ERC. Para salir ileso de este nuevo ciclo, Sánchez tendrá que despegar una labor de pedagogía que tendrá que tener su réplica en esa nueva cúpula y en el rearme ideológico que salga del cónclave gallego.
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